Las vacunas son un método de inmunización. El proceso se ha desarrollado con el fin de erradicar, tratar y prevenir padecimientos que de otro modo serían graves e incluso mortales para los humanos.
Existen dudas y mitos al respecto; sin embargo, vale la pena mencionar que, por la tasa de éxito que ha tenido en muchos casos, son unas de las opciones más seguras disponibles.
¿Para qué sirven las vacunas?
Las vacunas fortalecen el sistema inmunológico para que pueda reconocer y combatir eficazmente enfermedades infecciosas, ayudando a reducir brotes contagiosos y creando protección tanto para los individuos como para la comunidad.
¿Cómo se fabrican las vacunas?
Algunos detractores sostienen que “no sabemos qué le ponen a las vacunas”, y en un momento “eureka”, un activista comentó en Twitter: “¿Y si en lugar de una vacuna simplemente nos expusiéramos a una versión débil del virus que permitiera al cuerpo generar los anticuerpos necesarios para combatir la enfermedad real?”.

Aunque la idea suena simple, esa es esencialmente la base de cómo funcionan las vacunas: al exponer al sistema inmunológico a una versión controlada y segura del patógeno, se le permite generar defensas sin los riesgos que implicaría enfrentar la enfermedad real, incluso en una forma supuestamente leve. La clave está en la seguridad y precisión del proceso vacunatorio.
Para fabricar una vacuna, los científicos identifican el agente patógeno que causa la enfermedad y determinan qué parte de él puede generar una respuesta inmune segura y efectiva. A partir de ello, desarrollan una fórmula, ya sea que contenga el virus o bacteria atenuado, inactivado, fragmentos del patógeno o incluso instrucciones genéticas para que el cuerpo produzca una proteína del mismo. Este proceso se realiza bajo estrictas regulaciones de seguridad, con múltiples fases de investigación, pruebas preclínicas, ensayos clínicos y aprobación por autoridades sanitarias.
La tecnología y ciencia que se utiliza para su fabricación ha evolucionado considerablemente.
Tipos de vacunas
Los principales tipos de vacunas son los siguientes. Todas tienen el objetivo de crear una respuesta inmunitaria:
- Vacunas vivas atenuadas: usan el virus o bacteria debilitado.
- Vacunas inactivadas: el organismo está muerto,el cuerpo lo reconoce y genera defensas.
- Vacunas de subunidades, recombinantes, polisacáridas y combinadas: usan toxinas o proteínas, que pueden surgir del virus. En algunos casos, se combinan con un antígeno o incluso se crean en laboratorio.
- Vacunas con toxoides: usa toxinas inactivas o modificadas.
¿Las vacunas son efectivas?
Un esquema de vacunación es clave para lograr la inmunidad, ya que se deben aplicar cierta cantidad de dosis en determinado tiempo.
Mitos sobre las vacunas:
Fertilidad
Cuando surgió la vacuna del Covid-19 se difundió información como la siguiente:
- Impiden el desarrollo normal de la placenta
- Sus componentes atacan a los espermatozoides
- El 97% de los vacunados quedarán estériles
Sin embargo, no existe evidencia científica ni razón teórica para creer que las vacunas afectan la fertilidad de mujeres u hombres.
Referencia: Iacobucci G. Covid-19: No evidence that vaccines can affect fertility. 2021.
Autismo
El autismo, o trastorno del espectro autista (TEA), es una condición del neurodesarrollo. Es importante señalar que no existe evidencia científica confiable ni investigaciones que demuestren una relación entre las vacunas y el desarrollo de esta condición.
Enfermedades erradicadas:
Gracias a la vacunación, algunas enfermedades infecciosas que antes eran comunes y altamente mortales han sido controladas o incluso erradicadas. Un ejemplo destacado es la viruela, declarada erradicada en 1980 por la OMS. La rubéola y el sarampión se han reducido significativamente en muchas regiones del mundo.
Sin embargo, algunos virus y bacterias mutan con el tiempo, lo que representa un reto constante para la ciencia. Estas mutaciones pueden disminuir la efectividad de algunas vacunas, razón por la cual se actualizan regularmente, como ocurre con la vacuna contra la influenza.
- Viruela
- Rubéola
- Sarampión
Vacunas en la salud urológica y sexual
Vacunas contra el cáncer
Hay investigaciones para desarrollarlas para combatir a grupos de enfermedades específicos e incluso de forma personalizada para cada paciente. Las que son preventivas para infecciones virales que pueden provocar cáncer y ya existen son:
Vacuna para el VPH
Esta es la mejor manera para prevenir la infección o desarrollar Cáncer Cérvico Uterino, de Pene y Oral. También es un tratamiento para quien ya está infectado y protege contra otras cepas, manteniéndose inactivas y disminuyendo la aparición de nuevos cuadros.
VPH en hombres: claves para entenderlo y prevenirlo.
Vacuna anti hepatitis B:
Es parte del esquema de vacunación de los recién nacidos y se compone de 3 dosis.
También se recomienda su aplicación en adolescentes y adultos, especialmente aquellos en riesgo o que no fueron vacunados durante la infancia. Una de las principales formas de prevenir la infección por hepatitis B es usar preservativo en las relaciones sexuales y evitar el contacto directo con sangre y otros fluidos corporales. Su impacto es tal, que si no se trata, la infección puede volverse crónica y aumentar considerablemente la posibilidad de desarrollar enfermedades hepáticas graves, incluido el cáncer de hígado.
Día Mundial contra la Hepatitis
Uromune
Para quienes padecen infecciones urinarias recurrentes, el inmunoestimulante Uromune® representa una alternativa innovadora y prometedora. Este tratamiento, formulado como spray sublingual, ha demostrado desde su lanzamiento hace cuatro años una notable efectividad: el 92% de los pacientes reportan una reducción significativa en la frecuencia de infecciones tras 15 meses de uso continuo. En muchos casos, la mejoría comienza a notarse a partir del primer mes, con beneficios más evidentes a partir del tercer mes.
Aunque en Estados Unidos aún se encuentra en proceso de aprobación por la FDA y en Canadá no está disponible por falta de ciertos estudios regulatorios, las investigaciones clínicas hasta ahora lo consideran seguro, incluso en personas con inmunosupresión. De hecho, se han documentado resultados exitosos en pacientes con trasplante renal.
En México, Uromune ya está disponible y ha sido utilizado con éxito por Urólogos en Vallarta durante los últimos tres años, con resultados clínicos favorables.
Los efectos secundarios reportados han sido mínimos y transitorios, como sequedad bucal o una ligera sensación de escozor sublingual tras la aplicación.
Para quienes conviven con infecciones crónicas del tracto urinario, Uromune ofrece una opción terapéutica respaldada por evidencia y experiencia clínica.
Semana de la inmunización
Esta conmemoración anual, impulsada por la Organización Mundial de la Salud tiene como objetivo generar conciencia sobre la importancia de las vacunas para prevenir enfermedades, salvar vidas y promover la salud global. Se celebra en distintos países del mundo con campañas educativas, jornadas de vacunación, difusión de información científica y actividades comunitarias,
Se conmemora del 23 al 30 de abril.
Conclusión
Vacunarse es una de las decisiones más responsables y seguras para proteger nuestra salud individual y colectiva. Existen campañas gratuitas ofrecidas por instituciones gubernamentales, así como opciones de atención particular.
En Urólogos en Vallarta podemos ayudarte de distintas maneras: brindamos orientación sobre salud sexual para prevenir el contagio, te apoyamos para completar el esquema de vacunación de VPH en adolescentes y ofrecemos acompañamiento si ya cuentas con diagnóstico, además contamos con Uromune como parte del tratamiento para infecciones urinarias recurrentes.
¡Invertir en inmunización es invertir en calidad de vida!